Calle 3 con la Séptima Avenida. Ocho de la mañana |
- "No lo entenderás si no vas más despacio".
- "¿Qué quieres decir?".
- "Que vas muy deprisa, casi no miras las fotos".
- "Pero,... pero si todas son iguales".
- "Todas son iguales, pero cada una es distinta de las otras".
Casi dos décadas después, maravillosa escena nunca perdida de mi memoria. Auggie (Harvey Keitel) y Paul (William Hurt) en la trastienda del estanco de Auggie, en Brooklyn, un lugar donde Auggie es un “tipo que no se limita a cobrar detrás de un mostrador”. Auggie muestra a Paul su proyecto. La Obra de su vida. Y habla sobre la captura de los instantes, de las pequeñas cosas a veces ignoradas, de la fugacidad de los momentos, del tiempo retenido, de la contemplación y la calma. Porque la vida es eso. Un puzle de momentos fugaces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario